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El claustro de Santa María la Real es una de esas joyas que Nájera conserva de su pasado histórico.Un recorrido por sus pasillos llenos de luces y sombras mientras la luz del sol atraviesa los arcos es una estampa que nunca se repite dos veces igual.Raquel ha sabido recoger en su cuadro esa luz especial que envuelve el claustro tanto al amanecer como al atardecer.Y, porque no, como soñar es libre, podría ser el boceto del escenario de un futuro espectáculo teatral.Raquel, ¿me equivoco mucho?
El fuego baila su danza sobre los sarmientos rendidos.Voraz que es él los va destruyendo poco a poco en su seno.Su crepitar es el dolor ante el destino final que les aguarda.Pero los sarmientos se toman una última venganza.Acaban con el fuego danzarín convirtiéndose en rescoldo.Es la danza del fuego y los sarmientos.Una danza eterna.
En el escenario los actores se transforman y dan vida a sus personajes.Junto con el decorado, las luces y el sonido forman ese gran espectáculo del directo, del momento, de lo efímero.El público, sentado en las butacas, comparte por unos instantes sus vidas con las de los actores.¿O quizás sólo comparte sus vidas con las de los personajes?Cuando baja el telón, el teatro se queda vacío, silencioso, obscuro.Solo los ecos de los momentos vividos permanecen entre sus paredes.Es el eco de las risas, de las alegrías, de las tristezas, del miedo, de los aplausos.Y después, con el tiempo, la soledad.El mundo de la farándula es así.
Las brujas no vienen de muy lejos. Nacen en Matute.Isabel tiene allí su mundo mágico de brujas y peregrinos.Una casa grande en el centro del pueblo es su taller, su mundo creativo.La porcelana toma forma en sus manos.El fuego hace el resto.
Mas allí del casco antiguo de Nájera, en la otra orilla del río Najerilla, están los Barrios Altos.Compuestos por los barrios de Wichita y San Lázaro forman la parte con mas habitantes de la ciudad.Es la Nájera moderna.Es su extensión natural.
El Paso malo es uno de los lugares mas bonitos que hay en Nájera.Es un lugar dónde el corte del monte sobre el camino mantiene un equilibrio inestable, a veces casi imposible.Y con las lluvias y el tipo de terreno que es, los desprendimientos que se producen ayudan a incrementar ese equilibrio.La madre naturaleza va esculpiendo su obra con el paso del tiempo.Como siempre.