miércoles, 16 de mayo de 2012

Espejo roto, espejo inútil. (06-05-2012)

En este mundo en el que nos toca vivir lo que ya no es útil pasa a ser inútil.
En este mundo en el que nos toca vivir lo que es inútil debe ser destruido.
Este espejo ya inútil no reflejará mas el mundo que le rodea.
Este espejo quedó abandonado a su suerte en un camino a la salida de Nájera. 
Ya amanece,
detrás de los cristales 
la noche triste
Del libro "El Aroma de los Tilos" de mi amigo Luis Cubas.

6 comentarios:

  1. El inútil de verdad es el descerebrado que lo tiró en un camino.Están llenando nuestros caminos de trastos.viejos. Dentro de no mucho todos los caminos serán un vertedero y dejarán de ser útiles para pasear. Y todos contentos, nos deshacemos de lo inútil.

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  2. Llueve,detrás de los cristales, llueve y llueve......

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  3. Hola Cerra.

    Razón tienes. Pero por desgracia es la forma que algunos "descerebrados" tienen de deshacerse de lo viejo.

    Este espejo en concreto está en la salida de Nájera al comienzo del Paso malo.

    Al final la naturaleza siempre sufre las consecuencias del mal hacer de los humanos.

    Tenemos pendientes esas clases de "cura" y unos cuantos cavas, por supuesto.

    Un abrazo artista.

    Javi.

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  4. Me alegro de ver que Javí empieza a citar versos muy bellos por que son muy sugerentes. Sí, con demasiada frecuencia la estupidez humana logra el contradiós de que amanezca la noche.
    Me alegro de oír al maestro Cerra a quien "le duele su Nájera" y no es a él sólo a quien le pasa.
    Margary sigue citando muy evocadoras canciones...
    Estoy en muy buena compañía.

    Nada más añadir una cosa.

    A mediados del s. XVIII (1759) Carlos III, nuestro último rey como Dios manda,llega a Madrid y horrorizado se da cuenta de que allí todo lo que estorba en casa es, en cualquier momento, arrojado por la ventana a la calle, eso sí, avisando al desgraciado viandante con el grito de "¡Agua va!".

    Ahora miramos un poco más "el que dirán", la honrilla hipócrita, y hacemos lo mismo en "las afueras".

    Carlos III estuvo a punto de perder el trono por querer corregir ancestrales malas costumbres (eso que llamamos "la Tradición")-recuérdese el motín de Esquilache- pero acabó consiguiendo que Madrid comenzase a dejar de ser de ser un castizo y chulapo poblacho manchego.
    No lo consiguió del todo ni mucho menos.

    La urbanidad-el saber vivir en una ciudad-, la educación-el empeñarse en no ser un borrico de dos patas- son el cimiento de la civilización, la manera de comportarse de los que no desean volver a los no lejanos tiempos en los que andábamos siendo monos haciendo monerías en las ramas de los árboles.

    Ya el respetar la Naturaleza, nuestra madre, son palabras mayores y refinamientos exquisitos a los que dentro de millones de años igual llegamos.
    Pero... ¡Y lo bien que nos lo pasamos así y lo "modeellnos que semos", oíga, Ud.!

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  5. Hola Villegas.

    Me gustan los versos. Este es en concreto un Haiku de mi amigo Luis Cubas.

    Escribió un libro, "El aroma de los tilos" que cuanto mas lo lees mas jugo le sacas. Es de esos libros que se deben tener en la mesilla. Y es gratificante leer un Haiku cada noche antes de dormirse.

    Gracias Luis por tu sensibilidad y tu amor a ese maravilloso paraje que es el Paso malo donde compartimos tantas veces ese lugar secereto donde se conjugan el canto de los pájaros, el murmullo del Najerilla y el aroma de los tilos.

    Villegas, un abrazo.

    Javi.

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  6. AMIGO ROBERTO:cuanta razón llevas"nos deshacemos de lo inutil"(lo cual no siempre significa que no valgan para nada)Que pena que no podamos dehacernos de los "inutiles";como quien coloco una pancarta referente a una boda en la rotonda de la variante la cual daña la sensibilidad de una persona cón un minimo de verguenza;si en este momento no la han retirado debe de ser retirada ¡sin mas!.Se me olvidaba decir que en esa misma zona,saliendo direccion Logroño,algun descerebrado ha arrojado,al lleco,no un espejo roto,si no un cristal de buen tamaño intacto.Lo dicho AMIGO ROBERTO que pena que no nos podamos librar de los inutiles.

    BACARDI

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