"La Rioja es tierra propicia para ver los extraterrestres", libro de Arturo Antón. Páginas 05 y 06.En la fotografía de la página 05 aparece el observatorio O.V.N.I. que "El Coco" tenía en la carretera de San Asensio.
Si no recuerdo mal, un muñeco de tamaño natural se encontraba en su entrada y al abrir la puerta se levantaba su brazo con un hacha en la mano.
Allí se estableció el "Centro conexión cósmico Nájera".
Hola Javier, yo, la verdad, y contado así, no me creo nada, pudo quedarse dormido o simplemente ver lo que siempre había deseado ver.La reacción de su mujer era de esperar.Y la de todo el pueblo también, pero si que es cierto que tampoco hacía daño a nadie,
ResponderEliminar¿Alguien sabe por qué Arturo no fue enterrado en Nájera?
Señor estadistico, hoy es mi último e irregular comentario, llevo un fin de semana tan movidito que estoy deseando que llegue el lunes para trabajar ¿que no Javier?ja,ja,ja. Desde el viernes que era la fiesta del colegio de mis hijos y representamos las madres una obra de teatro, en concreto "Annie la huerfanita" que llevamos 2 meses ensayando los lunes, miércoles y jueves de 3 a 5 de la tarde,después los disfraces, ensayo con Javier, grabaciones varias, comidas, esta mañana colocando estanterías... y no os agobio más, ahora, todo ello con mucho gusto, Me pregunto, ¿como se puede aburrir la gente?
En fin que me voy, Villegas un abrazo, Javier 1001 besos.
Hola amigos,
ResponderEliminaryo no llamaría loco a alguien que defiende unas creencias o unas ilusiones, simplemente está en otra onda de los que no las compartimos.
Pienso que tuvo que sufrir lo suyo y, aun así, no se echó atrás en dar a conocer sus 'experiencias'.
No sabía que había muerto hasta que lo leí aquí; pero, creo Raquel, que sus padres eran de Granada. Quizá quiso descansar en su tierra.
Como buena najerina, nunca lo consideré un loco; para mí era Arturo Antón, el fontanero (muy bueno, por cierto). Lo que cada cual haga en sus ratos libres, es cosa suya.
Nos dejó escritas sus inquietudes más íntimas. Con respeto hacia su persona, me dispongo a leerlas. Muchas gracias, Javi, por traerlas.
Yo tampoco me aburro, Raquel, tengo más actividad -si cabe- que a los 18 años.
Por Nájera 'paro' poco, exclusivamente para estar con mi familia y mecer mis ojos en las aguas del río Najerilla.
Un cariñoso abrazo.
Hola Raquel y Blanca.
ResponderEliminarSupongo que todos estamos un poco locos y tenemos nuestras locuras.
Si no se hace daño a nadie, sigamos nuestras ideas y creencias. Por extrañas que sean. Al final componen nuestra vida.
¿Está mas loco el que cree en extraterrestres que el que no cree en nada?
Yo también, dentro de lo que le conocí que no fue demasiado, apreciaba al "El Coco".
Y creo que se merece que le recordemos en este blog de Nájera.
2011 besazos para ti, Raquel, y otro montón para ti, Blanca.
Javi.
Estoy de acuerdo con Blanca en que hay que partir del respeto a la persona de Arturo Antón y de cualquier ser humano al que nos refiramos. Pienso con Mario Bunge que “sólo los fanáticos odian a las personas tanto como odian las doctrinas”. Dicho de otra manera más sencilla, es correcta la enseñanza católica que dispone “odiar el pecado y amar al pecador”.
ResponderEliminarEstoy también de acuerdo con ella en que cada cual en sus ratos libres tiene perfecto derecho a hacer lo que le dé la real gana, a condición de que permita que los demás hagan lo mismo y su actividad a nadie perjudique. Atención, que aquí estamos hablando de un padre con tres hijos.
Yo no sé bien –y dudo que alguien lo sepa- si lo que aquí describe son sus “inquietudes más íntimas”. Gracias a Dios en esos terrenos nadie tiene entrada más que uno mismo. Lo que sí parece es que esas inquietudes eran las que él pretendía que nosotros creyéramos que eran las más íntimas. Hay testimonios de que este “personaje” (creo que ante un “personaje” netamente teatral estamos) como todos los personajes, simulaba y disimulaba lo que le convenía cuando le convenía. Era un ser humano y los seres humanos, como buenos “actores” que son, no han sido nunca de fiar.
Era un magnífico fontanero. En eso estoy de acuerdo Y también estoy de acuerdo en que no estaba loco. Sabía bien el terreno que pisaba y qué hacer para que su “actuación” tuviera éxito. Y éxito tuvo. Que su mujer no estuviera de acuerdo en que el Coco perdiese el tiempo en construirse ese “personaje”, me parece muy razonable. Le llamaba “locura” porque así se denominan esas actividades en correcto español. Perder el tiempo uno en cosas inútiles y sin beneficio es no estar uno en sus cabales.
Sufrir, lo que es sufrir, no creo que sufriera mucho. El escogió cómo hacer que tuviera éxito su personaje y pagó gustoso un precio por ello. Ser diferente tiene un coste y querer ser muy diferente tiene un mayor coste. La gente es libre y libremente aprecia a quien le merece aprecio. Es de tiranos el creer tener derecho a que siempre, en todo lugar y todos digan amén a mis más atrevidas ocurrencias. La tolerancia no excluye la crítica y el rechazo.
Y por último yo distinguiría entre “experiencias”, que son conocimientos de lo real obtenidos de forma natural a través de los sentidos normalmente usados; y alucinaciones, obsesiones y paranoias, que son falsas o forzadas experiencias; e ilusiones, que son el puro y liso engaño de sí mismo y de los demás.
Las creencias son unos conocimientos razonables, socialmente aceptados y beneficiosos para el individuo y para la sociedad sobre realidades metafísicas o sobrenaturales, es decir, no comprobables por nuestros sentidos. La idea de una justa justicia divina más allá de la vida individual no es comprobable empíricamente, pero lógicamente esperable dado el fracaso de la justicia humana más perfecta y la injusticia radical que supondría el que los hijos de su padre y de su madre se fueran de rositas y que nadie pudiera “quitarles lo bailao”. No es justo que el asesinado vaya al hoyo sin que al asesino nadie, nunca le pida cuentas.
Si los extraterrestres estuvieran aquí, tendríamos pruebas objetivas de ello. No las tenemos, luego esa idea no pasa de ser una ilusión. Que anden por sus mundos, es una creencia.
A cualquier mediano lector de relatos bíblicos y de vidas de santos le parecería que el relato de la “manifestación”- de la epifanía- de los extraterrestres al Coco, está contada por éste siguiendo el esquema, por ejemplo, de las “vocaciones proféticas”. El Coco debió tener una infancia piadosa donde le explicaron muy bien la Historia Sagrada.
ResponderEliminarEl extraterrestre parece sacado de un relato relacionado con “el Mago de Hoz”. Todo es muy literario y maneja bien unos “géneros literarios” muy conocidos.
Aquí no hay más que pura literatura fantástica. Éste, como don Quijote, se creyó su personaje.
A mi me dijeron que lo enterraron en Cañas porque era de allí, pero no lo puedo asegurar. Un saludo a Villegas, espero que estés bien de los "faros".
ResponderEliminarHola Villegas.
ResponderEliminarMe alegro de que estés de vuelta tras el fin de semana.
He leído y releído con mucho interés el análisis estupendo que has hecho de Arturo Antón "El Coco" y la verdad es que poco mas puedo añadir yo.
Comparto que era listo (y gran fontanero) y que explotó sus fantasías hasta que quizás éstas mismas fantasías acabaron con él.
Su época de vidente, la de "El doctor Máximo", fue mas obscura que la época de los extraterrestres.
Sin embargo, este fin de semana pasado, una persona de total confianza y que le conocía bien, me ha confesado que asistió a una sesión de "El Coco" que le sorprendió.
Una vez fue una mujer a su consulta de vidente llorando y preguntándole por su marido que había desaparecido.
Tras concentrarse le dijo que estaba en un lugar rodeado de mucha agua.
Días después apareció ahogado.
Ya se que será una casualidad. Yo no creo en estos temas paranormales. Pero cosas así logran creyentes y adeptos.
En fin, creo que la entrevista en la prensa italiana de las páginas 08, 09, 10 y 11 son su legado en el terreno de los extraterestres.
Entonces contaré alguna historia mas de "El Coco".
Un fuerte abrazo.
Javi.
Hola Villegas.
ResponderEliminarY por seguir con "El Coco".
Yo en aquella época leía con gran interés en "La Gaceta del Norte" de Bilbao los artículos que escribía el periodista Juan José Benítez sobre los extraterrsetres y sus contactos con ellos.
Mas adelante escribió, con gran éxito, los libros de "Caballo de Troya" (el primero me gustó) sobre su regreso en el tiempo a la época de Jesucristo.
¿Y los libros de Erich von Däniken ("El mensaje de los dioses", "Las apariciones") sobre el mismo tema de los extraterrestres?
¿Se diferenciaban mucho estas "experiencias" de las que contaba "El Coco"?
Yo creo que fue una época especial donde convivíamos con los extraterrestres y quizás situándonos en ella sea mas fácil entender la razón de su mensaje.
Un abrazo.
Javi.
Hola Villegas.
ResponderEliminarAclaro que convivíamos con los extraterrestres lo he dicho en sentido figurado.
Personalmente no creo que se haga nadie millones de kilómetros desde el lejano espacio exterior para llegar a la tierra y esconderse.
Un abrazo.
Javi.
¡¡Javier...pero qué morro tienes y como disimulas!!! No puedes esconderte más, ya lo he dicho en capítulos anteriores y reincido, en nuestro planeta hay dos extraterrestres de excepción el primero que bajó y se quedó es la "Duquesa de Alba" (yo de mayor quiero ser ella)no hay más que verla,cada día más joven, ¡si todavía nos va a dar otro heredero! y el segundo ¡¡TU!! y lo digo de primera mano.
ResponderEliminarNo cambio ni una coma del mensaje de Villegas, absolutamente de acuerdo con él.
1001 besos "marcianito".
Y ¡¡Viva la duquesa!!
Hola Raquel.
ResponderEliminarYa se que soy extraterrestre pero no se lo cuentes a todo el mundo. Ahora ya estoy con las escamas de lagarto para irme a dormir.
La Duquesa de Alba y yo venimos del mismo planeta, Ganímedes, pero ella me saca la delantera.
¡Como liga! Es una bomba.
2011 besazos (a ti, Raquel, no a la Duquesa).
Javi.