Aquel día estábamos acabando a marchas forzadas el estupendo belén de La Santa Cruz.Casi sin darnos cuenta en la noche sonaron las doce campanadas y llegó el dia de Nochebuena.
Subimos al coro con Jose Félix para dejar unas maderas que sobraban del belén.
Por unos momentos se hizo el silencio.
Nos quedamos quietos admirando la vista de La Parroquia desde lo alto.
Era una vista para nosotros desconocida.
Quizás estuvimos ahí, inmóviles, mas cerca del cielo.
Estuvimos, eso si, en las alturas.
La parroquia de la Santa Cruz, la gran desconocida najerina, no es en absoluto "un mero asunto de curas".
ResponderEliminarEs un soberbio edificio que, a pesar de latrocinios, incendios intencionados y horteras restauraciones, conserva un magnífico legado artístico casi desconocido.
Es una pena que, dado el incivil y barbaro mundo en el que vivivimos en el que toda barbaridad imaginable encuentra comprensión e impunidad colectiva: ¡¡¡ la cobardía, la sumisión y el rebañiego obedecer son ahora virtudes cívicas cardinales!,deba permanecer cerrada gran parte del día. Su interior es el más delicioso oasis de paz que se pueda encontrar en la ciudad. Es un Paseo bis, pero de otra manera.Los dos, naturalmente, Ilustrados.
Siempre ha estado a la sombra de la protagonista, Santa María La Real, yo, para remanso de paz, lo siento pero me quedo con los claustros, pero la verdad que esas noches que estuvimos montado el Belén, además de pasarlo bien fue muy agradable, te envolvía un "algo" y eso que desde su capilla el Cristo nos observaba, casi intimidándonos, es normal rompimos el silencio entre martillazos, taladros y risas.
ResponderEliminarEs una pena que el coro esté tan deteriorado, pero hay una mágnífica vista desde allí arriba como muestra la foto de Javier.
Aquellos días me daba por cantar, sonaba genial, el eco, no mi voz, ja,ja,ja, pero tuvieron que aguantar.
Un domingo subimos con José Félix y los crios al campanario fue una gran aventura para ellos tocar las campanas... aunque la subida está de pena, hay muchos rincones que necesitan una buena restauración, pero ya se sabe...
En fin, si que es una gran desconocida, pero no será por el empeño de José Félix.
Abrazos Villegas, a ver cuando te veo por Nájera, Javier 1055 besazos.
Hola Villegas.
ResponderEliminarCon Jose Félix he conocido admirado esta Parroquia de la Santa Cruz.
Son muchas las sorpresas que encierra en su interior y que merecen visitarse.
Y no menos admirable es la ilusión con que Jose Félix cuida de este lugar.
Tengo pendiente realizar un reportaje de la mano de Jose Félix.
Y además, por que no decirlo, Jose Félix es del Athletic d Bilbao.
Un abrazo Villegas.
Javi.
Hola Raquel.
ResponderEliminarTe has adelantado en tu comentario porque esa sensación que sentiste montando el belén también la sentí yo.
Ver esa iglesia en silencio, majestuosa, entre luces y sombras, es difícil de describir.
Y la vista desde el coro es grandiosa.
Por cierto, me apunto a subir al campanario.
2.355 besazos "Dire".
Javi.
El clautro se hizo para pasar y pasear sin detenerse. Es el centro desde el que ordenadamente se accede a todas las dependencias del monasterio. Es también el marco ideal para desfiles y procesiones.
ResponderEliminarLa arquitectura de la parroquia de la santa Cruz se hizo para estar sentado sosegadamente pensando.
La cantidad de luz natural, y su forma de penetrar desde fuera, está genialmente calculada para recoger la atención y concentrarla.
La elegante disposición del espacio de salón que tiene ( su bien medida altura, sobre todo), lleva a lo mismo.
La temperatura ideal, el silencio buscado, el olor, el orden de las cosas, también acompañan.
Tanto relaja esa organización espacial que como estés cansado, lo que acabas es durmiendo en santísima paz.
El claustro es para andar. La santa Cruz es para estar sentado. Son arquitecturas de finalidades opuestas.
La Iglesia lleva dos milenios construyendo diversas arquitecturas útiles para sus fines.
Sabe bien lo que hace.
Hola soy Jesús, espero que antes de un mes salga publicada otra pequeña cosilla que estoy haciendo estos dias sobre la verdadera olvidada de Nájera. La volveré a publicar en la web, y dejaré copias en ayuntamiento y biblioteca.
ResponderEliminarVamos a ir dándole tiempo al tiempo, y si tienes mano con el buen José Félix a ver si hablamos un rato.
Un saludo.
Jesús:
ResponderEliminarMe figuro que eres: Jesús Barriuso Sáenz, el del artículo del palacio de los Cantabrana. Esa información fue muy de agradecer.
La que anuncias ahora la espero con igual interés.
Un afectuoso y agradecido saludo.
Hola Jesús.
ResponderEliminarCuando publiques esa nueva "pequeña cosilla" confío que nos lo digas en el blog.
El artículo del palacio de los Cantabrana fue, como bien dice Villegas, estupendo.
Saludos.
Javi.