El otoño ha llegado una año mas a la naturaleza con todo su esplendor.
Que la vida sea bella como las flores de la primavera,
y bella la muerte como las hojas de otoño.
Rabindranath Tagore.
Llueve,
detrás de los cristales, llueve y llueve
sobre los chopos medio deshojados,
sobre los pardos tejados,
sobre los campos, llueve.
Pintaron de gris el cielo
y el suelo
se fue abrigando con hojas,
se fue vistiendo de otoño.
La tarde que se adormece
parece
un niño que el viento mece
con su balada en otoño.
Una balada en otoño,
un canto triste de melancolía,
que nace al morir el día.
Una balada en otoño,
a veces como un murmullo,
y a veces como un lamento
y a veces viento.
detrás de los cristales, llueve y llueve
sobre los chopos medio deshojados,
sobre los pardos tejados,
sobre los campos, llueve.
Pintaron de gris el cielo
y el suelo
se fue abrigando con hojas,
se fue vistiendo de otoño.
La tarde que se adormece
parece
un niño que el viento mece
con su balada en otoño.
Una balada en otoño,
un canto triste de melancolía,
que nace al morir el día.
Una balada en otoño,
a veces como un murmullo,
y a veces como un lamento
y a veces viento.
"Balada de otoño" de Joan Manuel Serrat.
Disfrutemos, pues, del otoño.
Mañana es tarde y noche, vispera del día de difuntos.
ResponderEliminarEn vez de plegarnos a la estúpida y cara fiesta de la "calabaza Jalogüín",¿por qué no recobramos nuestra vieja tradición de cuentos de terror (los hay excelentes en La Rioja) o releemos a los chavales textos tan hermosos como algunas Leyendas de Bécquer (El Monte de las Ánimas, v. g.)o tan románticos como El Fantasma de Canterville de Oscar Wilde o algún relato más serio del genial Edgar Allan Poe, si van para mayorcitos?
El misterio de la muerte se va descubriendo bien en esas lecturas.
Su trivialización mercantil nos hace más estúpidos y a nuestros niños más entontecidos.